martes, 20 de noviembre de 2007

Los inicios de caperos

Con el tiempo, el carnaval ha cambiado un poco pero no ha perdido su esencia. Antiguamente, absolutamente todos los veraneantes tenían que jugar y el que no jugaba era prácticamente obligado, se metían a su casa a sacarlo, pintarlo y pintar las paredes de su casa. No se usaba pintura de barco, sino grasa del tren que pasaba por Mejia, brea y anilina roseada con un aparato de fumigador.Se iba por todo Mejia con los caperos en busca de más personas. TODOS tenían que jugar, los que no querían eran pintados y también tenían que dar trago y comida a los que si estaban jugando (hoy en día pintar casas está prohibido, pero si se va en busca de trago).Fueron las mujeres quienes empezaron a embadurnarse de aceite de cocina y protegerse con gorros de baño, polos de manga larga, etc para evitar que todas esas sustancias permanezcan el ellas; sin embargo, eso lograba más ganas por parte de los hombres a atacarlas y jugar con ellas. El juego era brutal, pero nadie se quejaba. Carnaval y caperos era una forma de divertirse al igual que hoy. Todos en Mejia eran una gran familia así como hoy que nos encanta el carnaval.

Enrique Olazabal-Mejia su historia y su club

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Se que caperos es increible, me encantaria ir este verano xq x lo q c los arequipeños son unos juergueros

Anónimo dijo...

No tenía idea de tu blog..de hecho no se quien eres, pero está chevere!. Por cierto buen collage!. HDE